La entropia de la vida: el emperador de todos los males
Hoy quiero escribir sobre un libro que leí hace ya un tiempo, resulta que actualmente estoy leyendo un libro que se llama: eso lo explica todo, es un libro con ideas bellas, elegantes y profundas sobre cómo funciona el mundo, de lo grandes pensadores de hoy, resulta que la gran mayoría piensan que tal vez la idea más hermosa actualmente es la selección natural, sin embargo me llama la atención John Tooby que no plantea como la vida va en contra de las leyes de la física, de la tendencia a la entropia del universo y nos da una propuesta muy interesante sobre cómo podríamos usar la teoría de los Marcos de referencia de Galileo para entender que en realidad la vida también tiende a la entropia, pues por medio de la replicación puede producir organismos altamente adaptados o eliminar organismos que no han alcanzado las expectativas.
Cómo médico me hizo pensar que los errores de la replicación pueden llevarse al nivel de la biología molecular y entonces si podríamos decir que en su forma más básica y fundamental la célula también tiende a la entropia, aunque la vida como dice Tooby la vida ingeniosamente trata de volver a su lugar. Este pasaje me hizo pensar en que hay otro tipo de entropia, uno más fundamental y más aterrador uno que Markunjee llama el emperador de todos los males: el cáncer. En su libro este oncólogo nos describe a esta terrible enfermedad como una entidad con vida propia, la antítesis del orden celular establecido es sin duda la proliferación celular desorganizada.
Así que no siempre, como menciona Tooby la vida logra volver las cosas a su lugar, aunque que bonito sería, porque si hay una enfermedad compleja, atemorizante, agresiva y retadora es está, el emperador de todos los males: una biografía sobre el cáncer, nos permite entender no solo está enfermedad, sino todo lo que la rodea, los principales avances realizados, la lucha de médicos, biólogos, activistas sociales y filántropos, para erradicar este mal. Leerla nos da una idea del sufrimiento y de todo lo que rodea está enfermedad. Dejo algunas descripciones del autor que hablan por si mismas:
El cáncer es una enfermedad expansionista; invade los tejidos, establece colonias en paisajes hostiles, busca un «santuario» en un órgano y luego migra a otro. Vive desesperada, inventiva, feroz, territorial, astuta y defensivamente; por momentos, como si nos enseñara a sobrevivir. Confrontar al cáncer es ponerse frente a una especie paralela, quizá aún más adaptada que nosotros a la supervivencia.
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